Movilización de agricultores de la provincia de Leoncio Prado y gremios de la ciudad de Tingo María a las 11 de la mañana del 05 de octubre. Foto Grupo Prensa Verde.
La huelga indefinida de los productores de la hoja de coca centralizada en la ciudad Tingo María cobró fuerza desde las 9 de la mañana y transcurrió en tranquilidad y tensa calma, no hubo actos de violencia solo pequeñas movilizaciones y una reunión de coordinación de los dirigentes cocaleros en el auditorio de la municipalidad de Leoncio Prado que culminó a las seis de la tarde, con la designación de una comisión para viajar a la ciudad de Lima con el objetivo de reunirse con el presidente de la PCM.
Las fuerzas de seguridad (efectivos de la policía) no tuvieron mayor trabajo porque no se presentaron amagos de violencia, salvo la limpieza de algunos tramos de las carreteras Federico Basadre y Fernando Belaunde que fueron bloqueados ligeramente con troncos y piedras al amanecer. Un buen número de vehículos de carga que se dirigían a Pucallpa quedaron varados a la altura del pueblo de Pumahuasi por fuerte bloqueo de la vía, mientras que en varios sectores de la carretera Tingo María – Aucayacu – Tocache se instalaban piquetes de control.
Hasta las 11 de la mañana se concentraron 800 agricultores en la plaza de armas que fueron llegando desde distintos sectores de la provincia de Leoncio Prado, momentos en que se dirigieron hasta el puente Corpac donde la policía nacional impedía el ingreso a la ciudad de agricultores provenientes del Caserío Bella, Inti, Jacintillo y del bolsón Cuchara, que finalmente lograron llegar a la plaza de armas.
Un fuerte cordón policial acompañó las movilizaciones de los agricultores cocaleros en la ciudad de Tingo María. Foto Grupo Prensa Verde.
Al grupo de cocaleros se sumaron en la rápida movilización pobladores de varios asentamientos humanos, del mercado de abastos, de las agrupaciones de transportistas y otros gremios que habían anticipado respaldo a la huelga indefinida. La policía nacional resguardó en todo momento a los grupos de manifestantes y vigiló que los piquetes no cometieran excesos.
A las 2 de la tarde unos 2 mil productores de coca del valle del Monzón hicieron su ingreso a la ciudad para recorrer algunas calles y ubicarse junto a los otros cocaleros a la espera de la gran movilización, fijada para las 3 de la tarde. Eduardo Ticerán presidente de la Central Nacional Agropecuaria Cocalera del Perú (Cenacop), cuya base mayor se encuentra en el Monzón, conducía la nutrida columna que coreaba lemas contra el gobierno y la prensa vinculada a la estrategia antidrogas peruana-norteamericana a la que consideran enemiga.
La ciudad permaneció durante todo el día con el 98% del comercio cerrado, mientras el 100% del transporte interprovincial paralizó sus actividades, solo una veintena de vehículos menores (motocarros) prestaron servicio en el casco urbano y lugares cercanos cobrando un precio mayor. No hubo labores educativas en previsión de posibles actos de violencia y por la falta de movilidad.
Trascendió que la ciudad de Tingo María respaldará la medida de fuerza cocalera por tres días, aún cuando Rosa Obregón la dirigente de la Federación de Aucayacu dijo que luego de las 72 horas dialogarán con las autoridades y pobladores porque la huelga es indefinida y así lo va entender la población para seguir prestándoles apoyo.
A las 3 de la tarde se inició una reunión de coordinación en el auditorio municipal que se prolongó hasta las seis de la tarde por las posiciones discrepantes y divergentes de los dirigentes: Unos apoyaban el cierre de carreteras para darle contundencia a la paralización, mientras otros sostenían que solo debía realizarse movilizaciones pacíficas para no crear focos de violencia; triunfó la primera posición. Mientras un sector consideraba que una comisión debía viajar a Lima para reunirse con el premier Javier Velásquez Quesquen, otro grupo recordaba que ya hicieron eso y les dieron con la puerta en la cara, por tanto los funcionarios de gobierno debía venir a la ciudad de Tingo María, triunfó la primera posición.
A las 5 de la tarde cansados de esperar la movilización los cocaleros ubicados en la Alameda Perú y plaza de armas, dormitaban y otros empezaron a preparar sus ollas comunes porque durante todo el día no habían probado alimentos, para luego buscar donde dormir. A las 7 de la noche una fuerte lluvia cayó sobre la ciudad de Tingo María.
Hubo duras críticas contra la parlamentaria andina Elsa Malpartida a quien acusaban de intentar quebrar la huelga al convocar una reunión de sus agremiados el sábado 03 de octubre y lograr que decidieran no respaldarla con el argumento que no representaba el sentir de los cocaleros. El dirigente Merino Lloclla de la Asociación de cocaleros de Tingo María y base de la Conpaccp decidió apoyar la huelga dejando mal parada a Elsa Malpartida.
La huelga indefinida de los productores de la hoja de coca centralizada en la ciudad Tingo María cobró fuerza desde las 9 de la mañana y transcurrió en tranquilidad y tensa calma, no hubo actos de violencia solo pequeñas movilizaciones y una reunión de coordinación de los dirigentes cocaleros en el auditorio de la municipalidad de Leoncio Prado que culminó a las seis de la tarde, con la designación de una comisión para viajar a la ciudad de Lima con el objetivo de reunirse con el presidente de la PCM.
Las fuerzas de seguridad (efectivos de la policía) no tuvieron mayor trabajo porque no se presentaron amagos de violencia, salvo la limpieza de algunos tramos de las carreteras Federico Basadre y Fernando Belaunde que fueron bloqueados ligeramente con troncos y piedras al amanecer. Un buen número de vehículos de carga que se dirigían a Pucallpa quedaron varados a la altura del pueblo de Pumahuasi por fuerte bloqueo de la vía, mientras que en varios sectores de la carretera Tingo María – Aucayacu – Tocache se instalaban piquetes de control.
Hasta las 11 de la mañana se concentraron 800 agricultores en la plaza de armas que fueron llegando desde distintos sectores de la provincia de Leoncio Prado, momentos en que se dirigieron hasta el puente Corpac donde la policía nacional impedía el ingreso a la ciudad de agricultores provenientes del Caserío Bella, Inti, Jacintillo y del bolsón Cuchara, que finalmente lograron llegar a la plaza de armas.
Un fuerte cordón policial acompañó las movilizaciones de los agricultores cocaleros en la ciudad de Tingo María. Foto Grupo Prensa Verde.
Al grupo de cocaleros se sumaron en la rápida movilización pobladores de varios asentamientos humanos, del mercado de abastos, de las agrupaciones de transportistas y otros gremios que habían anticipado respaldo a la huelga indefinida. La policía nacional resguardó en todo momento a los grupos de manifestantes y vigiló que los piquetes no cometieran excesos.
A las 2 de la tarde unos 2 mil productores de coca del valle del Monzón hicieron su ingreso a la ciudad para recorrer algunas calles y ubicarse junto a los otros cocaleros a la espera de la gran movilización, fijada para las 3 de la tarde. Eduardo Ticerán presidente de la Central Nacional Agropecuaria Cocalera del Perú (Cenacop), cuya base mayor se encuentra en el Monzón, conducía la nutrida columna que coreaba lemas contra el gobierno y la prensa vinculada a la estrategia antidrogas peruana-norteamericana a la que consideran enemiga.
La ciudad permaneció durante todo el día con el 98% del comercio cerrado, mientras el 100% del transporte interprovincial paralizó sus actividades, solo una veintena de vehículos menores (motocarros) prestaron servicio en el casco urbano y lugares cercanos cobrando un precio mayor. No hubo labores educativas en previsión de posibles actos de violencia y por la falta de movilidad.
Trascendió que la ciudad de Tingo María respaldará la medida de fuerza cocalera por tres días, aún cuando Rosa Obregón la dirigente de la Federación de Aucayacu dijo que luego de las 72 horas dialogarán con las autoridades y pobladores porque la huelga es indefinida y así lo va entender la población para seguir prestándoles apoyo.
A las 3 de la tarde se inició una reunión de coordinación en el auditorio municipal que se prolongó hasta las seis de la tarde por las posiciones discrepantes y divergentes de los dirigentes: Unos apoyaban el cierre de carreteras para darle contundencia a la paralización, mientras otros sostenían que solo debía realizarse movilizaciones pacíficas para no crear focos de violencia; triunfó la primera posición. Mientras un sector consideraba que una comisión debía viajar a Lima para reunirse con el premier Javier Velásquez Quesquen, otro grupo recordaba que ya hicieron eso y les dieron con la puerta en la cara, por tanto los funcionarios de gobierno debía venir a la ciudad de Tingo María, triunfó la primera posición.
A las 5 de la tarde cansados de esperar la movilización los cocaleros ubicados en la Alameda Perú y plaza de armas, dormitaban y otros empezaron a preparar sus ollas comunes porque durante todo el día no habían probado alimentos, para luego buscar donde dormir. A las 7 de la noche una fuerte lluvia cayó sobre la ciudad de Tingo María.
Hubo duras críticas contra la parlamentaria andina Elsa Malpartida a quien acusaban de intentar quebrar la huelga al convocar una reunión de sus agremiados el sábado 03 de octubre y lograr que decidieran no respaldarla con el argumento que no representaba el sentir de los cocaleros. El dirigente Merino Lloclla de la Asociación de cocaleros de Tingo María y base de la Conpaccp decidió apoyar la huelga dejando mal parada a Elsa Malpartida.
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