lunes, 19 de mayo de 2008

Jaque al poder

Cuarenta años después de las emblemáticas protestas que convulsionaron a Francia, el mundo aún siente el eco de su legado.

Después de mayo del 68 el mundo no volvió a ser el mismo. El alzamiento de 30.000 estudiantes de la Sorbona de París, no sólo puso en jaque al gobierno del general Charles de Gaulle, sino que cambió muchas cosas.
El feminismo, la sexualidad, la irreverencia, la ciudadanía y la esperanza de construir nuevos imaginarios sociales, saltaron al primer plano del mundo contemporáneo.
Cuarenta años después muchos se preguntan si la conmoción mundial de mayo del 68 valió la pena y si legó algo importante a la nueva generación. Lo cierto es que la imaginación no llegó al poder, como lo esperaba el filósofo Jean Paul Sartre, ni el amor se sobrepuso a la guerra de Vietnam y a las que le siguieron como lo reclamaban los estudiantes en sus grafitis.
El mismo Daniel Cohn Bendit, promotor a sus 23 años del histórico alzamiento y hoy eurodiputado alemán, cree que ese fue “un hecho pasajero que conviene olvidar”. Y el presidente francés Nicolás Sarcozy, lo identifica como fuente de males como el relativismo moral, la confusión de valores, la pérdida de autoridad, el cinismo, la irresponsabilidad y la especulación. Al parecer, el jaque al reinado del establecimiento sigue vivo y la partida del 68 no termina.

Cómo influyó en...

· Ejercicio de la sexualidad

El movimiento tuvo su chispa detonante en la exigencia de los estudiantes universitarios de la facultad de Nanterre para que les permitieran entrar en los dormitorios de sus compañeras, lo que era prohibido por las normas de la època. Pero los jóvenes querían romper el paradigma y exigieron el respeto a su autonomía para ejercer su sexualidad. Eso estuvo influenciado por dos hitos anteriores: el descubrimiento a principios de los 60 de la píldora anticonceptiva y la aparición de la minifalda en 1964, lo cual alimentó las exigencias de libertad sexual. En adelante, los velos sobre el tema se correrían y la sociedad empezó a ser más tolerante con la sexualidad de los jóvenes

· El feminismo: la mujer es protagonista

La defensa de la sexualidad puso a la mujer en el centro del debate y, entonces, empezó a reclamar mayor protagonismo en la sociedad, Ya no sólo era el derecho al ejercicio de su sexualidad, sino el reclamo de espacios sociales y políticos iguales al hombre. Los interminables debates de La Sorbona en la coyuntura del alzamiento estudiantil exploraron el rol en la sociedad de la mujer, su valoración como ser social y sujeto de derechos y volvieron la mirada sobre las relaciones familiares y la equidad de los géneros en la responsabilidad del hogar. En adelante, la mujer tendría más participación en el Gobierno, en la empresa y en el liderazgo de proyectos.

· Contracultura y confrontación

Para algunos analistas el movimiento de mayo del 68 “fue más que una manifestación, pero menos que una revolución”. En realidad había mucho de anarquía y de ruptura con el orden establecido y en el fondo pretendía establecer un nuevo orden instaurando otros valores culturales. El académico Antas Mockus lo advierte como una “valoración de lo libertario e irreverente”. Fue una revolución emotiva más que planeada, una expresión contestataria, de ruptura con la imposición, que encarnaba el gobierno de Charles de Gaulle y una petición de autonomía y expresividad. Se legó una actitud transgresora de las leyes que cifraban el comportamiento social.

· El movimiento obrero ganó más espacio

El apoyo a la movilización estudiantil de fuerzas obreras y de otros sectores de l a sociedad puso en jaque al gobierno y a la industria francesa. Los obreros iban a las plantas con guitarras y cantaban en vez de trabajar, a modo de protesta. La huelga general fortaleció al movimiento obrero, que logró más incrementos de salarios, un fenómeno que influiría en la negociación de convenciones colectivas de trabajo en el mundo occidental, en las décadas de los 70 y 80. Gracias al movimiento del 68, la clase trabajadora logró incrementos salariales de entre un 35% y 40%, incentivos y mejores condiciones laborales y el sindicalismo tomó alguna distancia de criterios con el Parido Comunista francés.

· La opción política por el medio ambiente

La apertura temática de mayo del 68 también parece influir en todo el movimiento ecologista. Antanas Mockus sostiene que sus secuelas se hicieron sentir en la Conferencia de Estocolmo, en 1972, que dio inicio al ecologismo contemporáneo y asegura que sin ese hito histórico “el ambientalismo habría sido un movimiento solemne”. Allí se empezó a tomar distancia crítica frente a la sociedad capitalista, de modo diferente al meramente economicista, fijándose en el daño que la industrialización causa al medio ambiente. En los 70 surgió el movimiento verde y hoy Daniel Cohn-Bendit, inspirador de mayo del 68, es un eurodiputado que lucha contra el calentamiento global.

· Una educación más consensuada

En sus protestas, los estudiantes franceses no arremetieron contra el rector de la Soborna, ni contra las autoridades universitarias, ni siquiera contra la Policía pese a los enfrentamientos de hecho en las calles. Lo que realmente hicieron fue confrontar el sistema educativo. La enseñanza era para ellos “un fósil heredado del feudalismo”, que debería ser reemplazado por un sistema democrático y abierto. La apertura de los dormitorios de sus compañeras fue sólo un pretexto. Una de las condiciones para calmar el alzamiento convenidas por De Gaulle y Pompidou fue revisar la restricción a las carreras sociales que se querían sustituir por técnicas y abrir espacios a las propuestas estudiantiles.

· La rebelión del lenguaje

La forma como se realizó la protesta estudiantil en cuanto al uso del lenguaje, inauguró un estilo expresivo relevante en este tipo de manifestaciones. El uso de grafitis que eran una construcción de frases ingeniosas y contundentes con mensajes políticos cifrados nacidos de la academia fueron una revelación linguística. “Prohibido Prohibir” (“Il est Interdit d’interdire”), es el más famoso de los grafitis del movimiento estudiantil y el que resume todo su inconformismo. Detrás de éste vinieron otros que alimentaron otras fuentes expresivas como las célebres caricaturas de Charlie Hebdo, un semanario francés de humor negro que adoptó el estilo ácido y sugerente de los grafiteros.

· Ejercicio de ciudadanía

El sentido de solidaridad emergió en las protestas de París del 68. Los ciudadanos, al ver a los estudiantes manifestándose en las calles y reprimidos brutalmente por la Policía, salieron a apoyarlos, ayudaron a construir barricadas para detener el avance policial y terminaron defendiendo el derecho a la protesta y ejerciendo su condición de ciudadanos que piden respeto del Estado a sus derechos. Eso puso en jaque al Gobierno que sólo veía una salida represiva al alzamiento estudiantil.

Se trató de acciones colectivas creativas para superar la falta de ciudadanía, que derivaron en las manifestaciones de los 70 y las recientes marchas contra victimarios en el país.

Personajes

- Daniel Coh-Bendit, conocido como El Rojo, lideró el alzamiento estudiantil del 68.
- El general Charles de Gaulle enfrentó la crisis como Presidente francés.
- Georges Pompidou era el primer ministro y negoció con los estudiantes.
- Christian Fouchet fue el autor de la reforma educativa que provocó el alzamiento.
- Francois Mitterand, líder opositor, apoyó las protestas y lanzó su candidatura presidencial.
- Jean Paul Sartre alentó el ideario estudiantil e intervino en la crisis.
- Jacques Monod, premio nobel de medicina, medió para superar la coyuntura.
- Alain Krivine, destacado apoyo político de El Rojo, que luego aspiraría a la Presidencia.

“Yo tiré piedra en París”

Yo tenía 27 años cuando me gané una beca en el Festival Nacional de Teatro como mejor actor en la obra ‘Amor a gogo’, con música en vivo de Los Flippers. Entonces me fui a París a estudiar teatro y luego cine documental. Viví tres años en Francia y participé en la revolución de mayo del 68.

Primero hice una etapa en Lyon con la compañía del dramaturgo, director teatral y cineasta Roger Planchon, quien en los años 60 crea Theatre de la Cité, en el que seguía las pautas de Bertolt Brecht.

Como se varó la estadía en Lyon por las protestas estudiantiles, me fui a París a principios de mayo. Ya las revueltas habían empezado en Nanterre, por donde pasé para llegar a París. Al día siguiente de mi llegada, los enfrentamientos, los debates y las discusiones se habían trasladado a la capital y los estudiantes se habían tomado las calles del Barrio Latino y las instalaciones de la Sorbona.

Las tomas empezaron por la sede de Filosofía. Ante la magnitud y la trascendencia del asunto, me integré activamente.

Estuve en la ocupación de la Torre de la Sorbona, en donde pasé dos noches. Mientras tanto se tomaban el Teatro Odeón, un símbolo de la cultura oficial. Hice parte de las barricadas y alcancé a echar piedra. Como no nos podíamos mover durante las ocupaciones, comíamos lo que podíamos: mucho queso, algo de vino y chorizo. Y medio dormíamos. Cuando podía, me iba a la casa a bañarme y a cambiarme de ropa.

En los días y las noches improvisábamos obras de teatro relativas a los acontecimientos, discutíamos nuestras ideas y posturas y también cantábamos. En esas discusiones participó Jean Louis Barreau, uno de los innovadores del teatro gestual.

Fueron jornadas muy creativas, emotivas y de enorme agitación. Cerquita del Odeón Antonio Caballero tenía un apartamentito con su hermano el pintor Luís Caballero. Teníamos conversaciones con Antonio, un hombre siempre muy crítico en todo sentido y contra todo.

En el ambiente se respiraba un ambiente guerrillerista porque acababa de publicarse El Diario del Che, en Bolivia. Fui alumno de Jean Rouch, uno de los impulsores del cine directo, que funcionó mucho en esa época y consistía en recoger la realidad, se hacían documentales sobre lo que estaba pasando en París.

Aunque mi dominio del francés no era muy bueno, fue suficiente para colaborar en las brigadas de teatro callejero. Monté obras para los estudiantes y los trabajadores. Repartí pasquines con Jean Paul Sartre, pinté grafitis y asistí a una conferencia de Daniel Cohn-Bendit, el gran líder estudiantil.

Perfil

Carlos Duplat, actor y director de televisión consagrado por las series: "Cuando quiero llorar no lloro" y "Amar y vivir".

Qué estaba pasando en...

· El mundo

Estados Unidos había ganado una gran batalla en Vietnam, pero perdía la guerra de opinión que provocó la caída del presidente Lindon Johnson. El mundo se convulsionaba con los asesinatos de Martin Luther King y Robert Kennedy, líderes carismáticos que representaban un futuro presidencial en EE.UU. El piloto británico Graham Hill ganaba su segundo campeonato mundial de Fórmula 1 con Lotus. Ganó las as 24 horas de Le Mans y las 500 millas de Indianápolis. La banda musical The Doors estaba de gira en Europa con una combinación explosiva de blues psicodélicos y la poesía insana de Morrison.

· Colombia

La muerte del cura Camilo Torres y la revolución cubana atizaban desde las universidades la lucha irregular de las guerrillas del ELN, las Farc y el EPL. Martha Traba, reconocida crítica de arte, promovía una agitación cultural e institucional que caló en su generación ganándose la antipatía del establecimiento En Medellín se realizaba la II Conferencia General del Episcopado Latinoamericano que impulsaba la promoción humana y una iglesia más visible. El presidente Carlos Lleras Restrepo promovía una reforma constitucional descentralista y la devaluación gota a gota que estabilizó el frente externo.

· Cali

Cali gozaba al ritmo de la canción de moda "Bomba en Navidad", de Richie Ray y Bobby Cruz, la cual se convirtió en un himno decembrino para los caleños. La ciudad disfrutaba con las series de televisión Viaje al fondo del mar, El Túnel del tiempo, Perdidos en el espacio, Tarzán, Jim West y El Santo. A la ciudad llegaban los taxímetros para cuantificar el valor de las carreras, lo cual provocó duras polémicas ya que muchos taxistas no los querían. En ese mayo, el presidente Carlos Lleras vino a Cali a inaugurar las plantas la Siderúrgica del Pacífico, Sidelpa, y Sucroquímicas, que impulsaron la industria regional.

Tomado de:

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